Moto del día: Ducati-Mototrans 250/4 GP

Moto del día: Ducati-Mototrans 250/4 GP

Con esta máquina Mototrans intentó llegar al Mundial del cuarto de litro aunque, finalmente, la situación se tornó complicada


Tiempo de lectura: 5 min.

En la historia del motociclismo español existen algunos diseños de competición dotados de una historia tan confusa como apasionante. En este sentido, posiblemente el que se lleve la palma sea el de la Montesa Nervo. Un prototipo del cual se sabe muy poco. De hecho, más allá de una anécdota sobre su robo en plena calle todo son debates y cruces de datos sobre lo que podría haber llegado a ser este modelo. Quizás, de haber llegado a algo concreto, el llamado a coronar la época dorada de las Sprint en las carreras internacionales. Además, tras el enigmático caso de la Nervo está el de la Ducati-Mototrans 250/4. También conocida como la MT 250.

Conservada aún por un coleccionista privado en Italia, este proyecto de competición se ha dejado ver alguna que otra vez por España desde que saliera del país a finales de los años sesenta. Sin embargo, como buen prototipo su historia no deja de tener lagunas y referencias contradictorias según la fuente que se consulte, haciendo de ella una verdadera pieza de deseo para los entusiastas de la casa catalana. Debido a esto, lo mejor será que vayamos por partes de cara a desvelar el contexto en el cual se gestó la Ducati-Mototrans 250/4. Para empezar, lo mejor será recordar cómo Mototrans siempre gozó de una amplia autonomía frente a Ducati.

De esta manera, lo cierto es que ésta no se comportó como una mera filial de la casa italiana. Lejos de ello, desplegó desde sus inicios un ambicioso programa de competición con frutos muy concretos en el panorama nacional. Todo ello, además, aderezado con el ensamblaje de modelos propios a partir de la tecnología patentada por Ducati. Así las cosas, a mediados de los años sesenta Mototrans quiso probar suerte incluso en los mundiales. Competición a la que se dirigió con una montura pluricilíndrica de 125 centímetros cúbicos y cuatro tiempos. De hecho, el diseño de su motor fue encomendado a Fabio Taglioni. Todo un alarde pues, como vemos, Mototrans estaba colaborando con Ducati de tú a tú en vez de ocupar un simple papel subordinado.

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Mototrans intentó llegar al Mundial desde 1965 con máquinas que incluso llegaba a encargar a la propia central de Ducati en Italia

Ducati-Mototrans 250/4, un proyecto demasiado ambicioso

Desgraciadamente, y a pesar de los esfuerzos realizados, la 125 pensada para el Mundial no resultó efectiva al estrenarse en 1965. No en vano, de aquellas los fabricantes nipones ya estaban entrando con una fuerza inaudita en los circuitos. Es más, las Honda pluricilíndricas estaban rondando los 30 CV – 35 CV en el caso de la RC148 con cinco cilindros – para dejar así muy atrás al diseño de Taglioni y sus tan sólo 23 CV. Obviamente, aquello supuso un duro revés para la empresa barcelonesa que, además, tenía que centrarse en mejorar su gama de serie.

De hecho, a finales de la década Mototrans ya estaba acusando los efectos de la crisis del motociclismo en España. Hecho que solventó gracias a los modelos de baja cilindrada al tiempo que, no sin una encomiable tozudez por las carreras, seguía presente en el segmento deportivo con monturas como la 24 Horas. No obstante, la necesaria ampliación de su fábrica la llevó a estar un tiempo fuera de los circuitos aún sin dejar de lado la posibilidad de asaltar de nuevo al Mundial.

Eso sí, aquel proyecto debería ser llevado a cabo no en solitario pero sí con un apoyo muy limitado por parte de la central italiana. No en vano, faltaba poco para que ésta tuviera que ser rescatada por el estado en 1969 tras comprobarse el preocupante estado de sus cuentas. Así las cosas, hacia finales de 1966 Mototrans iniciaba el proyecto de la MT 250 bajo la idea de llegar al Mundial de cuarto de litro con una máquina de cuatro cilindros, seis velocidades, cuatro tiempos y bastante potencia. Es decir, todo un alarde dentro del panorama español. Muy centrado tanto en los dos tiempos como en el desarrollo de modelos Off-Road para la exportación.

mototrans 250 4 (2)

Como en otras tantas ocasiones, la falta de liquidez cortaba las alas a proyectos que, además, se veían rebasados en lo mecánica por el auge de las monturas japonesas

Así las cosas, en 1967 llegaron las primeras citas en circuito de la Ducati-Mototrans 250/4. Y bueno, fuera cual fuera la primera carrera – aquí existen datos diferentes según la fuente – lo cierto es que los en torno a 50 CV anunciados para la máquina prometían bastante. Más aún tras haberse probado en el aún en obras Circuito del Jarama, donde el ingeniero Renato Amaroli había trabajado a fondo con el piloto Bruno Spaggiari, un auténtico referente a la hora de probar motocicletas de competición. No obstante, el resultado final se iba de peso – se pueden encontrar fuentes que lo elevan hasta los 130 kilos – y, además, la potencia finalmente no llegó a los 50 CV sino a los en torno a 43 CV. Cifras que, en la despiadada escalada tecnológica emprendida por los japoneses, se antojaban insuficientes. Más aún si, en el apartado logístico, tanto Ducati como Mototrans no estaban pasando precisamente por sus momentos más desahogados en lo financiero. Circunstancias que, una tras otra, finalmente dieron al traste con el proyecto de la MT 250 durante el mismo año de su estreno. Eso sí, ha quedado para la historia como una de las páginas más interesantes en toda la amplia trayectoria de Mototrans. ¡Que no caiga en el olvido!

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Miguel Sánchez

Todo vehículo tiene al menos dos vidas. Así, normalmente pensamos en aquella donde disfrutamos de sus cualidades. Aquella en la que nos hace felices o nos sirve fielmente para un simple propósito práctico. Sin embargo, antes ha habido toda una fase de diseño en la que la ingeniería y la planificación financiera se han conjugado para hacerlo posible. Como redactor, es ésta la fase que analizo. Porque sólo podemos disfrutar completamente de algo comprendiendo de dónde proviene.

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